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SALDRÁ LIBRE CLAUDIA MIJANGOS “LA HIENA DE QUERÉTARO”

  • Foto del escritor: AUDIXION
    AUDIXION
  • 24 sept 2018
  • 6 Min. de lectura

Claudia Mijangos Arzac nació en el año 1956 en Mazatlán, Sinaloa México. Su infancia y su adolescencia fueron felices, no sufría por ningún motivo, sus padres nunca la maltrataron y no tubo carencias económicas ni afectivas, se sabe que sus padres la cuidaban y amaban. Así transcurrió su vida hasta que comenzó a estudiar la carrera de comercio, tenía éxito en muchos sentidos. Incluso fue elegida como reina de belleza en Mazatlán.


Fruto del matrimonio entre Claudia y Alfredo nacieron tres hijos. Claudia María, Ana Belén y Alfredo Antonio de once, nueve y seis años respectivamente. Estos tres niños estudiaban en el mismo colegio en que su madre impartía clases.

Todo iba bien hasta que de un momento a otro Mijangos comenzó a mostrar repentinos cambios de carácter, a tal grado que su matrimonio era insostenible. Por lo que el divorcio fue inevitable. Claudia se quedó con la custodia de sus tres hijos. Aunque hay quienes aseguran que Alfredo nunca afronto su divorcio y por mucho tiempo le rogaba a su exesposa que lo perdonara, esto sin ningún resultado. Claudia siguió con su vida, trabajando en la tienda de ropa y dando sus clases de catecismo, pero no paso mucho tiempo cuando la gente que le rodeaba se percató de los problemas psicológicos que atormentaban a aquella ex reina de belleza Sus problemas eran graves, tanto, que se sabe que Mijangos se obsesiono con un joven sacerdote quien daba clases en el mismo colegio que ella. Claudia estaba profundamente enamorada, varias veces llego a mencionar que con tal de estar al lado de aquel sacerdote era capaz de hacer lo que fuera necesario.


Pasado el tiempo Claudia comenzaba a descuidar todos los aspectos de su vida. Tanto a sus hijos como las clases y sin mencionar a su persona, su aspecto físico era decadente. Esto era debido a que durante varios días, Claudia había comenzado a escuchar voces extrañas, pero no se lo quiso mencionar a nadie. Mucho menos a su esposo quien siempre había afirmado que ésta “estaba loca”.

Uno de esos días Alfredo se llevó a los niños a la kermes de su escuela y al regresar él y Claudia discutieron porque Alfredo se había enterado de sus sentimientos hacia el cura, pero en lugar de negarlo, ella defendió su sentir por ese hombre.

Tras horas de discusión Claudia hecho a su ex esposo de su casa y éste se fue no sin antes decirle. “Te vas a arrepentir”. Frase que muchos vecinos alcanzaron a escuchar. Mijangos se encerró y acostó a sus hijos, se puso la pijama y se dispuso a dormir, Fue aquella noche del 24 de Abril del año 1989, aproximadamente a las 5:00 AM cuando Claudia despertó de su sueño profundo pues había escuchado un fuerte susurro en su oído que le dijo: “ Mazatlán ha desaparecido y todo Querétaro es espíritu”. Estuvo un rato escuchándolas, tratando de decir si eran reales o no. Después de escucharlo en varia ocasiones decidió levantarse, vestirse e ir a la cocina, tomo tres cuchillos y se dirigió al cuarto de sus hijos. Ella los vio dormir tranquilamente por última vez, pues ya había decidido matarlos.

El primero en ser atacado y el primero en morir fue Alfredo Antonio, su pequeño hijo de seis años, quien fue agredido mientras dormía en su cama. Claudia se apoyó sobre la cama del niño, lo tomo de la mano izquierda y a nivel de la articulación de la muñeca, le ocasiono la primera herida. El niño, al sentirse herido, realizo un movimiento instintivo de protección, pero su madre siguió cortando lo hizo con tal frenesí que le amputo por completo la mano izquierda. El niño gritaba de dolor y terror, su madre le trato de cortar de cortar la mano derecha, casi consiguió arrancársela también. Pero las heridas que le ocasionaron la muerte fueron las más de 30 puñaladas que este niño tenía en el pecho.

Claudia cambio de habitación, se dirigió al cuarto de sus hijas, tomó un segundo cuchillo; había decidido utilizar uno diferente con cada uno de sus hijos. La segunda en ser atacada fue y ahora su víctima sería Claudia María, de once años, quien fue apuñalada seis veces. Herida de muerte y con los pulmones perforados, la niña aun alcanzo a salir del cuarto tratando de protegerse. “!No mamá, no mamá, no lo hagas!”, gritaba. Los alaridos de dolor y desesperación fueron tan fuertes, que los vecinos se despertaron. Pero decidieron no intervenir.


Fue entonces cuando tomo el último cuchillo y se dirigió con Ana Belén, de 9 años, quien no opuso mucha resistencia y la apuñalo en el pecho provocándole la muerte. Después bajo las escaleras corriendo en busca de la agonizante Claudia María, quien se había desmayado, boca arriba, sobre el piso que dividía la sala del comedor. Volvió a apuñalarla, luego la arrastro hacia la planta alta y coloco su cuerpo inerte en la recamara principal, junto con sus hermanos. Al final apilo a todos sus hijos en la cama y los cubrió con una colcha de color naranja. Limpio dos de los cuchillos tomo el tercero y se hizo cortes en las muñecas y en el pecho, tratando de suicidarse.

En la mañana del día siguiente Verónica Vázquez amiga de Claudia, tocó la puerta y le abrió Claudia quien vestía con ropa empapada de sangre y la mirada extraviada al mismo tiempo que le decía que sus hijos habían estado jugando con salsa kétchup. Verónica salió huyendo; el olor de la sangre era insoportable. Llamó a la policía de inmediato. Cuando los agentes llegaron de inmediato ingresaron a la casa la cual parecía una escena de terror.

A un lado de los cadáveres de los niños se encontraba su madre, en la esquina de la recamara había un sillón sobre el cual estaban dos cuchillos de cocina, uno de 41 centímetros y el otro de 33 centímetros, se halló en la recamara de las hermanas Claudia María y Ana Belén, caído sobre la alfombra y lleno de sangre desde la junta hacia la parte media de la hoja.

Los policías pensaron que la mujer estaba muerta pero La sorpresa fue que Claudia estaba viva por lo cual fue trasladada a la Cruz Roja. Cuando despertó dijo: “Mis niños están dormidos en la casa” ante las preguntas del Ministerio Público.

La asesina estaba sedada y amarrada de pies y manos. Se lo tomo su primera declaración el 27 de abril de 1989 a las 11:30 horas, tres días después de que masacrara a sus tres hijos.

Luego añadió más cosas, responsabilizo del crimen al sacerdote al que supuestamente amaba: “El padre Ramón me hablaba telepáticamente, el influyo para que me divorciara, pero como mi madre era un freno moral para que me uniera a él, el padre Ramón con maleficios mato a mi madre, como sigue trabajando mentalmente para poseerme y también mi marido quiere regresar conmigo y me trabaja mentalmente, fue tanta la presión que me descontrole”. Después cambio su declaración y dijo que no se acordaba de nada, que la había despertado su amiga que tocaba a la puerta de su casa y que después la habían trasladado al hospital, habla de sus hijos como si estuvieran vivos. Los periódicos condenaron su crimen y la bautizaron como “La hiena de Querétaro”.

El 23 de enero de 1992, fue trasladada del CERESO Femenil del Sur de la Ciudad de México a Querétaro.

Ahora a casi 30 años del asesinato Claudia Mijangos está por cumplir su sentencia y será liberada en junio del 2019.

“Han pasado 3 décadas y ella definitivamente esta arrepentida. Decidió que regresaría a la casa donde ocurrieron los hechos como catarsis para enfrentar el pasado y poder comenzar de cero, además de que sigue considerando a la ciudad de Querétaro como su hogar”, relató.

El defensor comenta que el juez permitió que volviera a su vieja casa solo con una condición: “él magistrado le permitió regresar con la condición de que la vivienda fuera derrumbada y construida desde cero, teniendo un diseño muy diferente a la antigua morada.

Esto para prevenir un shock emocional cuando llegué y evitar que su salud sea dañada. Los expertos determinaron que vivir en su antigua casa podría regresarle los traumas, por eso le advirtieron que si podría regresar siempre y cuando la casa fuera derrumbada y no se pareciera en nada a la anterior.

Claudia me pidió que contratara a un arquitecto, quien hizo un diseño muy diferente, comenzando porque la nueva casa será de un solo piso y la mayoría del terreno será jardín. Una vez que esté construida Claudia no podrá modificarla de ningún, o las autoridades la obligarán a venderla y cambiarse de domicilio”, relató.

Esperanza Cervantes R. Los Reyes Michoacán.

FUENTE:https://psicologiajuridicaforense.wordpress.com/

 
 
 

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